Desde el CEIS se entiende a la experimentación como un encuentro y puesta en común de distintas experiencias, así como una construcción de problemas y respuestas con base empírica para la búsqueda de soluciones. De este modo, la experimentación se presenta como un espacio de encuentro y de inteligibilidad donde distintas preocupaciones son convertidas en preguntas cuyas respuestas son ensayadas en la práctica, trascendiendo dicotomías tales como objetividad-subjetividad, enfoques metodológicos cuantitativos y cualitativos, que operan en la relación investigador-sujeto de investigación.
Por su parte, la innovación hace referencia a la producción de novedad desde una perspectiva y acción crítica. En un sentido amplio, no se limita exclusivamente a las prácticas de innovación relacionadas con la creación de tecnologías sino que traslada este concepto a otros espacios de la producción de lo social. Toda innovación se da en una composición, por ende, innovar es, entre otras cosas, el efecto de crear nuevas relaciones que alteran el conjunto. Por este motivo, desde este enfoque se incorpora el estudio de las tensiones y los cambios de formas que se producen cuando se procura o emerge lo diferente y lo disruptivo.
Es así como el CEIS pretende posicionarse como un actor institucional clave para la comprensión, investigación e intervención acerca de los procesos de cambio social en Uruguay y la región, en los temas que aborda.